Quiero hablar de una de mis aficiones que nacieron justo en los años en los que estábamos en la Uni: la Formula 1.
Ahora que este deporte ha sido encumbrado a uno de los puestos más altos entre las aficiones de los españoles gracias a Fernado Alonso, de lo cual me alegro mucho, porque también yo, tengo predilección por el asturiano, me vienen a la memoria los recuerdos de mi incipiente pasión por este deporte del motor que nació en 1984, cuando Ayrton Senna comenzó a pilotar en Formula 1, un bólido que sólo él, era capaz de sacarle el 200%; un Toleman-Hart, que para los que no conocieron aquella época, viene a ser como un coche de la parte media-baja de la parrilla, por ejemplo, los Toro Rosso de 2012. Con este coche, consiguió puntuar en alguna que otra carrera, sorprendiendo a todo el mundo que entendía del "gran circo"y eso que antes el 1º se llevaba 10 puntos y es 2º sólo 6, puntuando sólo 6 pilotos, incluso estuvo a punto de ganar su primera carrera en Mónaco bajo la lluvia, si no la paran cuando aún no se había cumplido el 75% de la carrera para el final porque se acercaba al que iba a ser su gran enemigo en los años posteriores, Alain Prost, que la lideraba y estaba cagadito de miedo, levantando la mano cada vez que pasaba por línea de meta para que su amigo y presidente de la FIA, francés como él, terminara por ordenar que la pararan, viendo como un novato brasileño a bordo de un coche de tercera categoría, le recortaba más de cuatro segundos por vuelta. Esta decisión le costó el campeonato de ese año en favor de Niki Lauda por medio punto, ya que si se hubiera cumplido más del 75% de la carrera, aunque hubiera sido 2º, hubiera cogido los puntos suficientes para ser campeón. ¡Todavía recuerdo aquella mañana de domingo viendo la carrera por televisión!
Al año siguiente, cambió de equipo, a Lotus, una escudería en claro declive, después de haberlo sido todo en Formula 1. Era el año 1985, el año en el que estábamos en 3º y se puede decir que aquí fue cuando me enganché de forma definitiva al espectáculo, que sé, mucha gente no entiende, pero que cuando tienes 17 años y alguien como este brasileño hace cosas con un coche que nadie es capaz de hacer, sientes que se parece un poco a ti, que luchabas contra todo y te querías comer el mundo. Los colores del Lotus, también tuvieron algo que ver, porque era el más llamativo de la parrilla, con ese negro y dorado de John Player Special. En su segundo año, fue capaz de ganar 2 carreras y quedar 2º en otras tantas, terminando 4º en el campeonato.
Recuerdo como ahora mismo la primera carrera que ganó. Era domingo, había ayudado a mi madre a hacer la ensaladilla rusa para comer y después me había ido a jugar el partido de fútbol de los domingos que jugábamos en casa, contra el Coreses, al que por cierto, ganamos 2-0. Mientras comíamos, vi la carrera, emocionante hasta la línea de meta, en la que pasó por delante de Nigel Mansel por una de las diferencias más escasas de la historia de los grandes premios. Mi alegría fue enorme, tanto más que ver al Real Madrid una liga o una copa de Europa.
Recuerdo como ahora mismo la primera carrera que ganó. Era domingo, había ayudado a mi madre a hacer la ensaladilla rusa para comer y después me había ido a jugar el partido de fútbol de los domingos que jugábamos en casa, contra el Coreses, al que por cierto, ganamos 2-0. Mientras comíamos, vi la carrera, emocionante hasta la línea de meta, en la que pasó por delante de Nigel Mansel por una de las diferencias más escasas de la historia de los grandes premios. Mi alegría fue enorme, tanto más que ver al Real Madrid una liga o una copa de Europa.
No voy a hacer un relato de toda su trayectoria porque, aunque corta por los motivos que todos conocemos, fue de las mejores de la Historia de este deporte y no sólo para mí, pienso que es el mejor de todos los tiempos. Hay muchas formas de cuantificar y calificar a los pilotos y no voy a entrar a discutir con nadie sobre ello, ni número de títulos que poseen, ni pole positions, ni vueltas rápidas, etc. Él pilotó en una época, donde todavía primaba la conducción pura sobre cualquier otra cosa y aunque el coche, la ingeniería, los neumáticos, etc, eran importantes, pongamos que el 70%, el resto, ese 30% era el piloto y él era la diferencia con todos los demás, aunque tuvieran coches infiinitamente mejores que el suyo.
Fue una época en la que se batió en duelos memorables con los mejores pilotos de aquella década maravillosa como Neslon Piquet, Alain Prost, Nigel Mansell, Damon Hill ( todos ellos campeones del mundo), Gerard Berger y un largo etécetera, incluido Michael Schumacher en sus dos últimos años de competición y en igualdad de condiciones, los batió a todos en calificación y en carrera.
Estuvo dos años más en Lotus, pero tanto él como los mejores equipos, sabían que estaba hecho para pilotar el mejor coche y al año siguiente fichó por Maclaren, teniendo como compañero de equipo, que no amigo, al todo poderoso y 2 veces campeón, Alain Prost, que destrozaba a todos sus compañeros en el terreno deportivo y personal, pero que Ayrton no pudo. Ese mismo año se proclamó campeón del mundo por primera vez. A partir de ese momento y por diferentes motivos, la relación fue cada vez peor y Prost tuvo que irse del equipo porque nadie en el, lo soportaba, después de ganar otro título del mundo lleno de polémica y que más que ganarlo en la pista, frente a Senna, lo ganó en los despachos y con la ayuda del presidente de la FIA, francés como el, Jean Marie Balestre antes de marcharse a Ferrari y acabar siendo despedido de éste por llorón ya que siempre echaba la culpa al coche cuando no era capaza de competir con el Maclaren de Senna, que volvió a ser campeón del mundo en 1990 y 1991.
Esta época fue la explosión de la Formula 1 a nivel mediático en el resto del mundo por los duelos casi a muerte entre ellos dos y en el que algunas veces se metían otros como Mansell o Hill, Patresse, etc.
En 1992 hubo un cambio radical en la Formula 1 y a falta de reglamentación sobre el tema, la electrónica y la robótica, se apoderaron del paddock y los Williams-Renault de Mansell y Patresse, arrasaron a todos de manera humillante, siendo sus coches más rápidos en más de un segundo por vuelta gracias a la ayuda de la suspensión activa y control de tracción en la que los pilotos, sólo se tenían que preocupar de pisar a fondo el acelerador y llevarlos por lo negro porque la electrónica, hacía el resto. Ganaron el campeonato dos años seguidos, uno de ellos con Prost, que listo y ladino como el solo, había sabido jugar sus cartas y se había cambiado a este equipo después de estar un año descansando, despedido de Ferrari. También fue muy listo al firmar su contrato y poner en una claúsula que mientras durara su compromiso con Williams, Senna no podría ser su compañero. De esta manera, se aseguraba que el brasileño, no ganaría más veces si el pilotaba aquel formula uno superior a los demás. Pero Frank Williams y los patrocinadores querían a Senna a toda costa y echaron a Prost después claro está de que ganara el título de nuevo con este coche imbatible y ficharon a Senna para darle lo mejor al mejor.
Esta fue la gran equivocación de Ayrton Senna, ya que el año de su fichaje, cambiaron las normas y se quitó todo tipo de ayuda electrónica. El Williams pasó a ser un más del montón en la parrilla y Senna tenía que luchar a brazo partido para domar al "potro desbocado" en el que se convirtió "la bestia" sin las ayudas electrónicas. Maclaren era mejor coche y sobre todo el Benneton de Michael Schumacher, del que Senna siempre sospechó que por alguna triquiñuela del archiconocido Briatore, mantuvo esas ayudas electrónicas escondidas.
Y llegó la 3ª carrera de la temporada en Imola. Senna necesitaba la victoria ya que se había tenido que retirar en las dos anteriores. Fin de semana nefasto, con el accidente de Barrichelo en los entrenamientos y el de Ronald Ratzemberger en la calificación que le costó la vida.Senna tenía malas vibraciones pero decidíó seguir. Hizo la Pole Position pese al accidente mortal del austriaco, pero estaba abatido y si hubiera sido por él, no hubiera corrido, pero no quería decepcionar y salió a ganar.
Lo que ocurrió después, es de todos conocido y no voy a hacer mención detallada. El más que posible fallo mecánico del coche y la mala suerte, acabó con su vida en la fatídica curva de Tamburello.
Para mí, los primeros de mayo, no son la fiesta del trabajo, si no el día que Senna murió en un circuito de carreras, para dejar de hacerme soñar cada fin de semana.
Recuerdo aquel día y la desolación que sentí con aquello, que no me parecía verdad, acude a mi memoria y aún me entristece recordarlo. En aquel entonces, ya llevaba casi 4 años en Madrid y compartía mi vida con la que hoy sigue siendo mi mujer. Hicimos el viaje de regreso a nuestra casa en Madrid, desde Zamora, esa tarde. Tuvimos todo el camino, la radio del Corsa encendida para saber noticias de la posible resurección de Ayrton, pero no ocurrieron y las lágrimas de tristeza, resbalando por mis mejillas, nos acompañaron durante los 250 Km de recorrido, siendo consolado por las caricias en mi pierna derecha por mi amada.
La Formula 1, siguió siendo mi afición a pesar de lo sucedido y de la televisión, en este caso Tele 5, que había cogido los derechos de retransmisión ese mismo año y que a partir del siguiente, por la baja audiencia, comenzaron a emitir las carreras en diferido a las dos de la mañana y allí estaba yo, viendo a los nuevos pilotos como Schumacher, que ese mismo año se proclamó campeón del mundo por 1ª vez.
El que me conozca sabe que no soy de ídolos, gurús, santos ni visionarios, pero Ayrton Senna cautivó mi atención desde siempre y sabiendo que era un ser humano con defectos, incluso más de los deseados, hacía que tuviera ilusión y alicientes por ver triunfar el talento, el virtuosismo, los principios y el trabajo continuo en pos de conseguir la victoria.
De alguna forma y salvando las distancias, Fernando Alonso, se parece un poco en esencia a lo que él defendía y como tal, tiene sus detractores y sus fervientes admiradores, como pasaba con el brasileño. Yo, me encuentro entre los que le admiran, sintiendo de forma intensa sus victorias, algunas de ellas épicas, como muchas de las que consiguió Senna...y es que los románticos somos así.
Hablaría sobre esto mucho más, de forma más detallada y con mucha más información, pero sé que no todo el mundo comparte esta afición y aunque para mí, este relato sobre un piloto de Formula 1, se queda corta, creo que para dar una idea de lo que significó para mucha gente, es suficiente.
En marzo de 2013 cumpliría 53 años, pero todo el mundo lo recordará joven e intrépido, luchando contra el crono en cada vuelta, en busca de la perfección.
Estuvo dos años más en Lotus, pero tanto él como los mejores equipos, sabían que estaba hecho para pilotar el mejor coche y al año siguiente fichó por Maclaren, teniendo como compañero de equipo, que no amigo, al todo poderoso y 2 veces campeón, Alain Prost, que destrozaba a todos sus compañeros en el terreno deportivo y personal, pero que Ayrton no pudo. Ese mismo año se proclamó campeón del mundo por primera vez. A partir de ese momento y por diferentes motivos, la relación fue cada vez peor y Prost tuvo que irse del equipo porque nadie en el, lo soportaba, después de ganar otro título del mundo lleno de polémica y que más que ganarlo en la pista, frente a Senna, lo ganó en los despachos y con la ayuda del presidente de la FIA, francés como el, Jean Marie Balestre antes de marcharse a Ferrari y acabar siendo despedido de éste por llorón ya que siempre echaba la culpa al coche cuando no era capaza de competir con el Maclaren de Senna, que volvió a ser campeón del mundo en 1990 y 1991.
Esta época fue la explosión de la Formula 1 a nivel mediático en el resto del mundo por los duelos casi a muerte entre ellos dos y en el que algunas veces se metían otros como Mansell o Hill, Patresse, etc.
En 1992 hubo un cambio radical en la Formula 1 y a falta de reglamentación sobre el tema, la electrónica y la robótica, se apoderaron del paddock y los Williams-Renault de Mansell y Patresse, arrasaron a todos de manera humillante, siendo sus coches más rápidos en más de un segundo por vuelta gracias a la ayuda de la suspensión activa y control de tracción en la que los pilotos, sólo se tenían que preocupar de pisar a fondo el acelerador y llevarlos por lo negro porque la electrónica, hacía el resto. Ganaron el campeonato dos años seguidos, uno de ellos con Prost, que listo y ladino como el solo, había sabido jugar sus cartas y se había cambiado a este equipo después de estar un año descansando, despedido de Ferrari. También fue muy listo al firmar su contrato y poner en una claúsula que mientras durara su compromiso con Williams, Senna no podría ser su compañero. De esta manera, se aseguraba que el brasileño, no ganaría más veces si el pilotaba aquel formula uno superior a los demás. Pero Frank Williams y los patrocinadores querían a Senna a toda costa y echaron a Prost después claro está de que ganara el título de nuevo con este coche imbatible y ficharon a Senna para darle lo mejor al mejor.
Esta fue la gran equivocación de Ayrton Senna, ya que el año de su fichaje, cambiaron las normas y se quitó todo tipo de ayuda electrónica. El Williams pasó a ser un más del montón en la parrilla y Senna tenía que luchar a brazo partido para domar al "potro desbocado" en el que se convirtió "la bestia" sin las ayudas electrónicas. Maclaren era mejor coche y sobre todo el Benneton de Michael Schumacher, del que Senna siempre sospechó que por alguna triquiñuela del archiconocido Briatore, mantuvo esas ayudas electrónicas escondidas.
Y llegó la 3ª carrera de la temporada en Imola. Senna necesitaba la victoria ya que se había tenido que retirar en las dos anteriores. Fin de semana nefasto, con el accidente de Barrichelo en los entrenamientos y el de Ronald Ratzemberger en la calificación que le costó la vida.Senna tenía malas vibraciones pero decidíó seguir. Hizo la Pole Position pese al accidente mortal del austriaco, pero estaba abatido y si hubiera sido por él, no hubiera corrido, pero no quería decepcionar y salió a ganar.
Lo que ocurrió después, es de todos conocido y no voy a hacer mención detallada. El más que posible fallo mecánico del coche y la mala suerte, acabó con su vida en la fatídica curva de Tamburello.
Para mí, los primeros de mayo, no son la fiesta del trabajo, si no el día que Senna murió en un circuito de carreras, para dejar de hacerme soñar cada fin de semana.
Recuerdo aquel día y la desolación que sentí con aquello, que no me parecía verdad, acude a mi memoria y aún me entristece recordarlo. En aquel entonces, ya llevaba casi 4 años en Madrid y compartía mi vida con la que hoy sigue siendo mi mujer. Hicimos el viaje de regreso a nuestra casa en Madrid, desde Zamora, esa tarde. Tuvimos todo el camino, la radio del Corsa encendida para saber noticias de la posible resurección de Ayrton, pero no ocurrieron y las lágrimas de tristeza, resbalando por mis mejillas, nos acompañaron durante los 250 Km de recorrido, siendo consolado por las caricias en mi pierna derecha por mi amada.
La Formula 1, siguió siendo mi afición a pesar de lo sucedido y de la televisión, en este caso Tele 5, que había cogido los derechos de retransmisión ese mismo año y que a partir del siguiente, por la baja audiencia, comenzaron a emitir las carreras en diferido a las dos de la mañana y allí estaba yo, viendo a los nuevos pilotos como Schumacher, que ese mismo año se proclamó campeón del mundo por 1ª vez.
El que me conozca sabe que no soy de ídolos, gurús, santos ni visionarios, pero Ayrton Senna cautivó mi atención desde siempre y sabiendo que era un ser humano con defectos, incluso más de los deseados, hacía que tuviera ilusión y alicientes por ver triunfar el talento, el virtuosismo, los principios y el trabajo continuo en pos de conseguir la victoria.
De alguna forma y salvando las distancias, Fernando Alonso, se parece un poco en esencia a lo que él defendía y como tal, tiene sus detractores y sus fervientes admiradores, como pasaba con el brasileño. Yo, me encuentro entre los que le admiran, sintiendo de forma intensa sus victorias, algunas de ellas épicas, como muchas de las que consiguió Senna...y es que los románticos somos así.
Hablaría sobre esto mucho más, de forma más detallada y con mucha más información, pero sé que no todo el mundo comparte esta afición y aunque para mí, este relato sobre un piloto de Formula 1, se queda corta, creo que para dar una idea de lo que significó para mucha gente, es suficiente.
En marzo de 2013 cumpliría 53 años, pero todo el mundo lo recordará joven e intrépido, luchando contra el crono en cada vuelta, en busca de la perfección.
eso que pone ahí arriba, es un contador de visitas??
ResponderEliminarSí, he decidido colocar unos cuantos adornos en el blog y uno de ellos es el contador de visitas, que está al principio de la página, pero al final también hay otros añadidos nuevos, como las entradas más populares y un traductor a cualquier idioma, pues tenemos visitas de muchos lugares del mundo.
Eliminarahí va la ostia, 13.000 visitas..... alguien leerá, digo yo, estos rollos que le contamos....
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