Discurría la primavera de 1989, y, por 1ª vez, visité los Chorros
del Mundo en el ámbito de un viaje de
prácticas de bichario y dasometría. El
entorno es impresionante y sorprendente, sobre todo para los que creíamos que
la provincia albaceteña era llana como la palma de la mano. El fenómeno
kárstico que da origen al salto, tiene la zona salpicada de pozas y oquedades
casi siempre llenas de agua. Sucedió que en una de ellas, un día, alguien tiró
una moneda, imagino que con el fin de dar curso a a algún inconfesable deseo, al
igual que se hace en la Fontana di Trevi, (la más famosa) y en otras muchas
albercas distribuidas por todo el planeta. Cuando pasábamos cerca de la poza,
algún compañero nos dio la voz sobre su
existencia, así que hacia allí nos encaminamos todos en procesión. Algunos
lanzaron monedas y, para si, sonrieron.
Otros nos quedamos pensativos dudando entre la necesidad imperiosa de pedir un deseo y que se cumpliese, y la necesidad, más
tangible, de disponer de algo suelto pa las cervezas de por la noche. Cuando bajamos a comer al restaurante dónde habíamos pactado
la pitanza, el Chuchi y yo, los dos zamoranos del grupo, nos quedamos un rato
intentando radiografiar el origen del agua de la poza. No podía ser freático, pues
estábamos en lo alto de una roca, ni
tampoco endorreico, pues nada parecía fluir hacia ella. El agua le venía de las
salpicaduras del salto. Flujo insuficiente, en cualquier caso, para poner coto
a nuestras aviesas intenciones. Cuando llegamos abajo, mientras los demás
jugaban la partida después del café, nosotros le cogimos prestao el cubo de la fregona al del restaurante, y
regresamos al pozo de los deseos. Empezamos a achicar agua, y no sé si por la perspectiva de los próximos
caudales, por la gamberrada en si, o por lo fácil que estaba resultando,
vaciamos la charca en un periquete. El botín: 6.754 pts, la mayoría en monedas pequeñas, pero también
en monedas de 100, 200 y 500 pts (la gente está loca). Teniendo en cuenta que
el tercio de mahou clásica y el del águila de toda la vida, costaban
entonces en Riópar, 65 pts,
se puede afirmar, sin ningún género de dudas, que esa noche inolvidable
de la primavera de 1989, los integrantes de la foto, nos bebimos los deseos de
medio Albacete.
Pregunta para mis compañeros: ¿por qué nos emborrachábamos tanto durante
las vigilias nocturnas de los viajes de prácticas? (se aceptan respuestas)
aquí os dejo el enlace pa que los conozcais
ResponderEliminarhttps://www.google.es/search?q=chorros+del+rio+mundo&biw=1280&bih=933&tbm=isch&tbo=u&source=univ&sa=X&ei=wTPjUdXzGOqu7AakjIGQCw&ved=0CDkQsAQ
veo que no da acceso directo. copiar y pegar es la solución....
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